La Asociación de Generadoras Renovables (AGR Chile) integró a APEMEC y sumó cinco nuevos socios hidroeléctricos, consolidando así su liderazgo en el sector de energías limpias. Esta alianza busca fortalecer la representación gremial y enfrentar unidos los desafíos regulatorios, técnicos y de inversión. Con más de 60 empresas asociadas, AGR proyecta una matriz energética más descentralizada y sostenible. La integración también refuerza su capacidad de influencia en la transición energética que impulsa Chile hacia la carbono neutralidad.
Fecha:Wednesday 28 May de 2025
Gestor:ESCUELA ESGEP
La unión gremial marca un nuevo hito para el sector energético al consolidar actores clave de la generación renovable en el país
Santiago de Chile, mayo de 2025 — En un movimiento que redefine el panorama gremial del sector energético chileno, la Asociación de Generadoras Renovables (AGR Chile) anunció la integración oficial de la Asociación de Pequeñas y Medianas Centrales Hidroeléctricas (APEMEC), junto con la incorporación de cinco nuevos socios vinculados al desarrollo de energía hidroeléctrica. Esta alianza no solo amplía el alcance de AGR Chile, sino que también refuerza su posicionamiento como uno de los principales referentes en la transición energética nacional.
La fusión entre AGR y APEMEC representa una evolución natural dentro de un contexto donde las alianzas son clave para enfrentar los desafíos energéticos, regulatorios y ambientales del país. Con esta integración, AGR Chile suma más de 60 empresas asociadas que abarcan desde desarrolladores de proyectos solares y eólicos hasta pequeñas y medianas hidroeléctricas, lo que amplía su diversidad tecnológica y fortalece su representatividad gremial.
Desde su creación, AGR Chile ha promovido una visión descentralizada y sustentable de la matriz energética. La llegada de APEMEC aporta una trayectoria especializada en generación hidráulica de pequeña escala, un segmento clave para las zonas rurales y de difícil acceso, que ahora se suma a un frente común por el desarrollo energético responsable.
Fuentes cercanas a ambas organizaciones indican que la integración fue impulsada por un alineamiento estratégico de objetivos: fortalecer la voz de las energías limpias frente a autoridades regulatorias, mejorar las condiciones de inversión, y unificar criterios técnicos y normativos ante las nuevas exigencias de sostenibilidad.
"Este es un paso natural que responde a una realidad energética cambiante. La unión de fuerzas no solo mejora la capacidad de incidencia, sino que genera sinergias técnicas y operativas que permitirán enfrentar con mayor solidez los desafíos de descarbonización", comentó un miembro del directorio de AGR Chile.
Con la disolución operativa de APEMEC, sus principales representantes y socios fueron absorbidos como miembros activos de AGR, permitiendo así la continuidad de sus propuestas y la defensa de sus intereses, ahora desde una plataforma más robusta y diversa.
Junto a la integración institucional, AGR Chile también anunció el ingreso de cinco nuevas empresas del rubro hidroeléctrico, las cuales operan proyectos de generación en distintas regiones del país. Estas compañías aportan no solo capacidad instalada, sino también experiencia en operación, licenciamiento ambiental y desarrollo de infraestructura energética a pequeña escala.
La identidad de las empresas aún no ha sido revelada públicamente, pero se anticipa que su incorporación añadirá más de 80 MW de capacidad instalada al portafolio de los miembros de AGR, en zonas estratégicas como La Araucanía, Biobío, Los Ríos y Aysén.
Este fortalecimiento llega en un momento clave, cuando el país avanza hacia una reconfiguración de su matriz energética y se espera una mayor participación de proyectos renovables gestionables, como las hidroeléctricas de pasada, que ayudan a equilibrar el sistema eléctrico frente a la variabilidad de fuentes como la solar o la eólica.
La integración de APEMEC y los nuevos socios refuerza el rol de AGR como articulador de la transición energética chilena, un proceso que no solo involucra cambios tecnológicos, sino también reformas normativas, incentivos de inversión y participación ciudadana.
Esta unión también responde a la necesidad de contar con un gremio técnico, propositivo y representativo que defienda el interés común de los desarrolladores de energías limpias frente a desafíos como:
Acceso equitativo al mercado eléctrico
Reducción de tiempos de tramitación ambiental
Incentivos a tecnologías complementarias y almacenamiento
Mejora de la infraestructura de transmisión
Participación de comunidades locales en los beneficios del desarrollo energético
Con esta integración, AGR Chile proyecta una imagen renovada y más representativa del ecosistema energético actual. Su capacidad de interlocución se verá fortalecida ante actores clave como el Ministerio de Energía, la Comisión Nacional de Energía (CNE), Coordinador Eléctrico Nacional y otras entidades públicas y privadas.
El gremio se plantea, además, como un espacio de encuentro para debatir propuestas sobre el diseño del mercado eléctrico futuro, aportando desde la experiencia de empresas que han sabido crecer en medio de contextos regulatorios complejos y que ahora buscan construir un sistema más resiliente, competitivo y sostenible.
La noticia ha sido bien recibida por diversos sectores. Expertos del rubro eléctrico han señalado que esta integración envía un mensaje claro al mercado: la unidad y la colaboración entre actores medianos y pequeños puede ser un motor clave para acelerar la transición energética, en un país que se ha comprometido a alcanzar la carbono neutralidad hacia 2050.
Para los territorios donde operan estas centrales hidroeléctricas, la medida también puede traer beneficios, al facilitar canales de diálogo más estructurados y la implementación de mejores prácticas en sostenibilidad y relacionamiento comunitario.
La unión entre AGR Chile y APEMEC, junto con la incorporación de nuevos socios hidroeléctricos, marca un hito en la historia gremial del sector energético chileno. Es una apuesta por la colaboración, la integración tecnológica y la defensa común de un modelo energético más limpio, justo y descentralizado.
En un momento en que el país necesita consensos para avanzar en su política energética, esta alianza demuestra que los gremios también pueden liderar el cambio.